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INJERTOS

Los injertos en el ámbito de la cirugía oral y maxilofacial representan una técnica crucial para la reconstrucción y reparación de tejidos duros y blandos, permitiendo restaurar la funcionalidad y estética en pacientes con defectos congénitos, traumáticos o resultantes de enfermedades. Estos procedimientos son fundamentales para mejorar la calidad de vida de los pacientes y son realizados por cirujanos especializados en este campo.

Injertos Óseos: Estos injertos se utilizan para reconstruir o aumentar la masa ósea en áreas donde el hueso se ha perdido debido a enfermedades periodontales, extracciones dentales, traumatismos o defectos congénitos. Los tipos de injertos óseos incluyen:

Procedimiento y Recuperación:


El procedimiento de injerto suele comenzar con una evaluación exhaustiva del paciente, incluyendo radiografías y tomografías computarizadas para planificar el injerto. Durante la cirugía, se prepara el sitio receptor y se coloca el injerto, que puede fijarse con
tornillos o membranas para asegurar su estabilidad. La recuperación varía según el tipo de injerto y el tamaño del defecto, pero generalmente incluye un período de reposo y seguimiento regular para asegurar la integración del injerto.

Conclusión:


Los injertos en la cirugía oral y maxilofacial son procedimientos vitales para la reconstrucción de tejidos duros y blandos, mejorando tanto la funcionalidad como la estética. Estos procedimientos, realizados por cirujanos especializados, no solo restauran estructuras dañadas, sino que también mejoran significativamente la calidad de vida de los pacientes. Con los avances continuos en materiales y técnicas quirúrgicas, los injertos seguirán siendo una piedra angular en el tratamiento de una amplia gama de
condiciones orales y maxilofaciales.

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